Empapada me he quedado

Consejo número uno para cuando uno se va a ver un nuevo espectáculo/obra:
No saber nada de nada. No leer críticas, ni siquiera la sinopsis (si podéis). ¿Por qué? Porque así lo que estáis viendo realmente os gustará o no. Nada de falsas expectativas.
Yo puedo decir con orgullo que me he pasado una hora y veinte viviendo este chaparrón, y encantada volvería a hacerlo.
Consejo número uno para cuando uno lee mis palabras:

Degustarlas y sacar conclusiones propias. 

Sin Miedo a mojarse... por mi parte ninguno, y por la del elenco tampoco. El guión es una pasada. Nos encontramos ante seis protagonistas tan comunes como la vida misma, con sus idas y venidas, sus gustos y disgustos, amores y miedos, ... Gente, al fin y al cabo, que vive con sus deseos inalcanzables y sus carencias, pero auténticos y diferentes. Y un narrador encantado de contarnos la historia desde fuera aunque esté dentro de la misma obra, con todo el poder de sus conocimientos que son los de todos, con esas conclusiones que sacamos de forma consciente o inconsciente pero que él exterioriza: ¿es mi vida lo que quiero que sea? ¿que traza ese camino de arena? ¿casualidad, sino? ¿por qué nos lleva a donde nos lleva?
En una sola palabra: humanidad. Y en el más puro de los estados, con todo aquello que te puede suceder el día de mañana sin pensarlo.
Poco más que decir de una historia que he devorado gratamente y la cual se ha bebido mi tiempo sin apenas darme cuenta. Un gustazo. Si podéis estos chicos estarán hoy en Móstoles actuando de forma gratuita.

P.D.: casi lo olvido. Un guiño a esa escenografía original y muy currada. Nos habeis trasladado al pisito sin pensarlo ;).