Y como muestra un botón

Mi neonato favorito lleva le friolera cantidad de 7 días de vida. Sé que los veteranos casi ni os acordareis (o sí) de esa ilusión de la primera semana, esos planes de nuevas entradas, esas ganas de contar cosas, esa adicción a los comentarios que llegan y que arrancan más de una sonrisa... Pero yo, ahora mismo, soy una coctelera emocional bloggera a mil revoluciones por segundo (bueno, no soy experta en cifras, así que imaginadme dentro de una coctelera en manos de un barman profesional- tio buenorro habilidoso-, de esos que hacen florituras para ponerte una copa).
Para los de las preguntas silenciosas (esas que llegan a mi cabeza según escribo los post, no sé si resultado de una mutación genética que esté desarrollando a lo x-men o simple telepatía bloggera): nop, nop estoy en la adolescencia. Más bien en la tierna infancia de blogger acompañada de, nada más ni nada menos, 15 compis de juegos. 15, 15, 15... que bien suena en mi cabeza. Así que sólo quería daros las gracias por vuestro apoyo.
¡Dejad de levantad la mano para preguntar! Ya os he oido (segunda paranoia mental bloggera, esto no pinta bien...) ¿Cómo que a qué viene el título? Vale, sip, casi lo olvidaba. Viene a que he creado mi pequeño y maravilloso... botoncito para el blog. Así que sed libres de linkear soñadores ;).

Una última cosa antes de que la emoción desmedida me produzca un colapso de recuerdos y me crea una gallina con alzeheimer. Podeis preguntar todo cuanto querais. lo que sea: pelis/libros/espectáculos recomendados, un tema sobre el que querais que escriba, ... cualquier cosa que surja de vuestras cabecitas cabe en el formulario de contacto.
Así pues me despido por hoy con una sonrisa en el alma y una carcajada infantil en el corazón.
Gracias angelotes.