Las 5 de Érase una vez...

¿Por qué debes ver Érase una vez?
1. Lo que no son los cuentos

Mala malísima y sus manzanas

La trama de Érase una vez gira en torno a Storybrooke: un pequeño pueblecito de Maine donde han sido desterrados los personajes de los cuentos en nuestro mundo. La artífice de todo esto y de la maldición que les impide salir del pueblo no es otra que La bruja malvada (véase madrastra de Blancanieves). Pero hay alguien que puede salvarles: Emma. La hija de Blanca y Encantador es la única capaz de entrar y salir de Storybrooke, y la única capaz de mostrarles la verdad... o al menos esta es la razón por la que la trae hasta allí Henry, el hijo biológico de Emma y adoptivo de Regina (aka Bruja malvada).
Así pues la serie transcurre entre personajes que no saben quienes son y que lidian con sus normales vidas, y las verdaderas historias de los cuentos de hadas.
2. Los cuentos
Adoro los cuentos. Así, con todas las letras. Cuando oí hablar de esta serie y supe que los cuentos guiaban la historia me dije: "bah, lo de siempre y como siempre. Pero le daremos una oportunidad". Para mi suerte no me arrepiento lo más mínimo de haber dejado entrar a Érase una vez en mi vida e imaginario. Si bien utiliza de base las historias que todos conocemos hace que, ni por asomo, sean iguales. Sorprenden y engancha conocer al personaje y descubrir su historia. Y todo-todo-todo tiene su razón y porqué.
3. Blanca y Encantador

¡Cuuuuuuquis!

Aíns, ¡cómo suben mis niveles de azúcar cuando estos dos salen en pantalla! Son cuquis como ellos solos, y su historia de amor no hace más que oscilar entre lo dulce y amargo. Podríamos decir que su amor es digno de cuento de hadas: tanto en su pasada vida como en la presente.
4. Familiar y fantástico
Da gusto poder ver una serie para toda la familia que de verdad puede contentar a todos sin caer en infantilismo alguno. La forma en que se cuentan las cosas es brillante y atrapa. La fantasía está bien tratada y no cojea. Se podría decir que es una serie redonda.
5. De-ta-lles
Soy una de esas amantes de las pequeñas cosas que engrandecen una serie. De esta me quedo, en primer lugar, con la historia y sus personajes.
El guión está bien narrado, sabe como atrapar al espectador sin caer en tópicos.
Los personajes son los de siempre sin ser los de siempre. Cada uno carga una pesada mochila de historias personales de esas que tocan la fibra y por las que son quienes son.
Y por último: el vestuario y la ambientación.
Un ole a los encargados de esta parte por estar en todos los detalles: como esa cesta de manzanas rojas brillantes que preside una mesa del despacho de Regina, esos detalles rojos que acompañan siempre a Ruby o los tonos pastel de Mary Margaret.
Es una delicia.

Estos son mis cinco por los que veo Érase una vez ¿Conocíais la serie? ¿Cuáles son vuestros motivos para verla o no verla?